Nuestra superiora general, M. Sacramento Calderón, realizó la visita canónica a la comunidad de Daimiel, del 9 al 13 de febrero.
Además de animar a la comunidad y a cada hermana a continuar siendo referencia carismática en medio de la comunidad educativa, les agradece por lo que enriquecen con sus vidas el carisma calasancio y las insta a seguir mirando al Señor Jesús, como la única referencia de sus vidas. Se reunió, a su vez, con la novicia y la postulante.
En el encuentro con el claustro del colegio le agradece su entrega a la misión educativa y señala entre otras cosas, que, aunque cambie mucho la sociedad, el objetivo que persigue la escuela calasancia: “hacer la felicidad humana”, como decía el P. Faustino, perdurará a través del tiempo, y nosotros posibilitamos que nuestros chicos sean felices a través de la misión educativa. También les dirige una palabra de “ánimo”, ante las dificultades que hoy conlleva la misión educativa, y les insiste en la necesidad de imbuirse cada día más del proyecto educativo calasancio, en la importancia de creer en nuestro proyecto educativo y apasionarse con él.
Asimismo, durante la visita se reúne con con la directora pedagógica del colegio, con el administrador y con el grupo de Misión Compartida, y visita algunas aulas de clase.
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