75 años después de haber pronunciado sus primeros votos como Religiosa Calasancia, M. Carmen Fernández, de la Comunidad de Madrid, manifestó su deseo de seguir respondiendo con la misma pasión a la vocación que Dios le regala cada día.
La celebración de sus bodas de diamante fue el 13 de mayo en una entrañable eucaristía en la que estuvo acompañada por su comunidad y algunas hermanas de la comunidad de Getafe, por M. Mª Luisa Domínguez, vicaria general, y M. Mª Carmen González, por su familia y algunas personas amigas muy cercanas a ella.
Esta celebración es un momento para seguir dando gracias a Dios por la entrega de M. Carmen y la fidelidad de Dios con ella, así como por la vida entregada de tantas hermanas que, con su vida, han mantenido vivo el carisma legado por San Faustino.